Y lo hace desde el primer silbato del referí, plantándose en la cancha con una marcada polifonía y pluralidad de estilos que conmueven a la hinchada, porque no es fácil hallar una propuesta artístico-cultural que, desde el papel, trate tan bien al balón.
Con este plantel, Aretha! salió de los vestuarios proponiendo magia y libertad en el juego, en un estadio de papeles donde la tribuna planta bandera y se reconoce con los colores que ondean en el pecho del equipo.
Estos son los dos zagueros centrales, el enganche y el goleador de un plantel que pide a la hinchada un grito de gloria, de jugadores que escriben y diseñan e ilustran, con zurda exquisita, una gambeta sobre el papel.
Es así que, desde jugadas gráficas en vertiginoso impacto de apasionantes llegadas al arco, de sucesiones temáticas, la hinchada es invitada a explorar una realidad suspendida donde las distintas ramas del arte le meten una diagonal a la creatividad, tiran un centro a la pasión, y con verdadera precisión descriptiva, la literatura toca con la filosofía, la cambia de lado para la crítica social, pica el humor, recibe, mete la pausa y le entrega un pase perfecto a la cultura popular que tira un centro al área, describe una parábola el balón, y la vanguardia que cabecea, pega en el travesaño, va arriba el nueve y la mete con la mano, despacito, como un suspiro, por encima del arquero. Un golazo. La hinchada lo grita y se agita en esta armonía y todos se abrazan a la vez, en una afortunada paradoja que otorga a Aretha! un cheque en blanco a esa expectativa que pagó con intereses en la cancha, a lo largo de 54 páginas de provocador contenido, encarando la realidad con los tapones de punta. Y lo hace con estilo y con hambre de gol.
Así, Aretha!, con un juego innovador y desprejuiciado, se posa en el círculo central, lista para entregar la pelota al referí y regalar la camiseta a la hinchada.
* Sea lo anterior, quizá, considerado una mirada parcialista de quien lleva puesta la camiseta de Aretha! como amigo, hincha y jugador, en ese orden; la mirada de alguien que sabe de cerca cuantas almas han sudado duro para lograr este